Es lo que tiene preocuparse más de lo habitual, más de lo
que merecen algunas personas, casi siempre trae consigo el dolor, ese dolor
macerado en lagrimas contenidas, al final caerán por su propio peso, aunque nos rompan las entrañas y es que no siempre nos podemos sentir correspondidos, aunque nos
lo repitamos muchas veces, siempre acabamos cayendo en el mismo error, una vez
tras otra, no hay duda, hay quien nace de una condición y muere de la misma
forma y por mucho que lo suframos, seguirá siendo la misma historia que contar,
el mismo garabato que descifrar, el mismo escenario que habilitar para seguir
intentando volar a pesar de no contar con alas para poderlo lograr.
pd:
por mucho que lo intentemos,
hay batallas perdidas
antes de empezar...